HOY SE CONMEMORA EL
DÍA MUNDIAL DE ESTOS SITIOS NATURALES
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La isla Santay es
uno de los 18 humedales que
posee Ecuador.
Actualmente este sitio también
forma parte del Área
Nacional de Recreación y
es uno de los
principales atractivos turísticos y
ecológicos. Foto:
Archivo / El Telégrafo
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En Ecuador existen
18 ecosistemas que actúan como una planta natural de depuración ambiental. La
concienciación en los niños y jóvenes es uno de lo objetivos de este año.
José Delgado
Mendoza, especial para EL TELÉGRAFO
El Día Mundial de
los Humedales ya es un evento planetario.
Hablar de humedales significa pensar en los múltiples servicios
ambientales que este ecosistema ofrece y que van desde la generación de agua y oxígeno hasta
millones de toneladas de alimentos producidos por año. Constituyen una
permanente planta natural de depuración ambiental, zonas de control de contaminación, inmensos
filtros, barreras contra tsunamis. El
humedal es así mismo el lugar de vida para una enorme biodiversidad y es
territorio de comunidades y pueblos que a lo largo de su existencia han podido
servirse y protegerse mutuamente.
La protección de los
humedales cobra mucha importancia en un mundo cada vez más poblado e
industrializado. Buscar el equilibrio
ante estas amenazas no es una tarea
fácil sin compromisos gubernamentales, empresariales e individuales de por medio y su debido
cumplimiento. Por eso existe la
Convención de Ramsar, creada en 1971 y que acoge a 168 países signatarios. Se
trata del marco legal y técnico para regular y usar racionalmente estos
espacios naturales costeros y de montaña.
Ramsar ya ha
reconocido en el mundo 2.186 humedales que en conjunto harían un territorio de
208,5 millones de hectáreas. Un poco más de 10 veces el Ecuador.
En la Isla Santay y específicamente
en su escuela este 2 de febrero será muy
especial; las maestras y alumnos tendrán
un día de actividades diferente ya que están programados una charla sobre la importancia de los
humedales, y el suyo en particular, y también un concurso de fotografía para
niños de entre 7 y 15 años titulado ‘El humedal en donde vivo’.
Celebrar este día
desde hace 14 años es parte del calendario ambiental escolar de la única
escuelita de la isla creada en 2000 por gestión de su población. Ese mismo año,
por la insistencia y asistencia de un grupo ambientalista guayaquileño,
las autoridades de Ecuador tomaron la gran decisión de solicitar a la
Convención de Ramsar considerar como Humedal de Importancia Internacional las 4.705 hectáreas que contemplan
las islas Santay y el Gallo, más sus aguas circundantes del río
Guayas. Así nace el Humedal Santay hasta
entonces el quinto de los ahora 18
sitios declarados por Ecuador a la convención de Ramsar. El lugar está
fichado con el número 1.041.
Recientemente el
gobierno ecuatoriano, en un afán por integrar esta vasta zona verde e impulsar
el turismo de contacto y observación de la naturaleza en la isla, ha conectado
Santay a sus más cercanas ciudades, Guayaquil
y Durán, a través de dos largos puentes peatonales. Esta vinculación a Santay representa una
enorme responsabilidad ambiental y social para estas ciudades, sabiendo
que la primera es la más grande del país
y la segunda una de las más densamente pobladas en Ecuador.
Justamente, más de medio millón de personas han llegado a
Santay en el semestre junio-diciembre 2014, y en este sentido la población de
la comunidad de Santay tiene opiniones mitigadas sobre la influencia en su
bienestar del turismo intenso que viven
actualmente, especialmente sábados y domingos, aunque el acceso está abierto
todos los días de la semana. Su opinión
es legítima pues sienten la presión
física y psicológica de dicha presencia, hablamos de una comunidad de no más de
240 personas que ha debido adaptarse a ese frenético ritmo y situación.
Valdría la pena que
las autoridades evalúen ampliamente el impacto en la comunidad al cumplirse el primer año del acceso a la
isla por los puentes. Un estudio que podría aprovecharse también para integrar
aspectos que los pobladores se cuestionan frecuentemente como son los servicios
básicos ofrecidos a la comunidad y que no han sido completamente implementados,
el pedido de creación del Museo Comunitario,
para que el turista sepa que la
zona que visita tiene una historia que contar y que habla de su presencia en la
isla y cuál ha sido su influencia para que lo que es hoy el humedal y área
protegida “más visitada” del Ecuador se haya conservado de la mejor manera
desde que desaparecieron las grandes haciendas a fines de los 70.
Los santayenses también quieren que se retire la prohibición que pesa
sobre ellos de tener animales domésticos y de criar el poco ganado y gallinas
que algunas familias tienen para comercio y subsistencia. En fin, cosas
normales en cualquier población rural viviendo en un humedal, situaciones que se regulan pero que no se prohíben pues
hacen parte de su vida.
El humedal Santay
también es desde febrero 2010 Área Nacional de Recreación y como tal parte del
Sistema Nacional de Áreas Protegidas del
Ecuador. Santay ostenta así 2 categorías de protección que deben
complementarse en el manejo ordenado y conjunto de la biodiversidad y sus
aspectos socio-culturales. Pobladores, autoridades y turistas, todos somos
responsables de Santay y los 17 otros
Humedales Ramsar del Ecuador.
Humedales para el
futuro
Según el
investigador natural, Humberto Rojas Rodríguez, la problemática de los
humedales se agudiza cada año, de manera simultánea con los problemas
ecológicos y humanos, al punto de vivirse una contradicción entre el medio
natural y la civilización y, en la misma especie, entre sí.
Rojas señala que
estas dificultades en el entorno no solo son locales, por lo que la solución
que se requiere debe ser global y así lo
refiere el lema de Ramsar para este 2015: ‘Humedales para nuestro futuro’.
El investigador y
autor de la obra ‘Luz... a la crisis del planeta’ y la Fundación Nahumpro,
desarrollará en instituciones educativas de Cundinamarca, Colombia, el proyecto
‘De la práctica escolar, al equilibrio natural’ para difundir las acciones en
los humedales.