01 abril 2022
A propósito de los robos en la Isla Santay y mal estado de la infraestructura de sus ciclovias
Tras la detención de una embarcación en las inmediaciones de la Isla Santay conteniendo estructuras de aluminio que constituían las bases de la ciclovía entre Duran y la comunidad de la isla, vale la pena que se separen los temas; Robos y material de las ciclovías, debido a que los medios de comunicación están haciendo una amalgama de estos temas que si merecen ser vistos uno a uno para su mejor conocimiento y análisis.
Es a partir de esa fecha en que quedó cerrado el puente, que se dejó de cuidar y mantener ese sector de la ciclovía que llega hasta la confluencia con la llegada a Santay por el puente a Guayaquil. La isla contaba con personal de guardianía privada, que por falta de presupuesto estatal ese servicio se detuvo.
En esas condiciones de falta de vigilancia ocurre que delincuentes empezaron a entrar a la isla Santay por vía fluvial provenientes posiblemente del sector de Durán. Comenzaron a aparecer tramos de la ciclovía desprovistos de las barandas de protección de aluminio y posteriormente de las bases del mismo material.
Los guardaparques del Area Protegida una vez al tanto de aquello por sus caminatas de control, pusieron en conocimiento de esas anomalías a su superior, quien subió la queja a sus directivos y ellos por su parte a la Fiscalía en Durán.
Finalmente la queja llega a la Capitanía de Puerto de Guayaquil quienes hacen esta operación que deja al descubierto un tema ampliamente conocido en Santay. La acción llega tarde, muy tarde.
EL MATERIAL DE LAS CICLOVIAS
Cuando hablaba de separar los temas, ahora vamos con el otro, el material del que esta hecha la superficie de rodadura de las ciclovías que es lo que evidencia un deterioro permanente desde hace algunos años,por no decir desde el inicio en 2010. En efecto, el material utilizado para ese motivo, es decir resistir una gran demanda de peso y presión de bicicletas no es apto para ese uso. Lo más extraño fue la disposición perpendicular y no transversal de las láminas de ese material, ocasionando un rápido pandeo y fractura y para terminar no respetaron en su instalación ningún espació de separación para permitir la dilatación normal del material debido a cambios de temperatura.
Aquí un detalle interesante, en la presentación del proyecto que la Presidencia de la República hizo un día sábado a todo el Ecuador, se ve que la disposición de los elementos de la rodadura no corresponden a como fueron colocados. (??)
Fotos tomadas de Diario El Universo
Con esas consideraciones de material no apto para el uso al que sería destinado y del mal posicionamiento del mismo el deterioro fue casi inmediato. Aparte de la rotura por impacto, hay que anotar el debilitamiento a causa del sol y el ambiente salino de Santay. Son características que debieron ser consideradas para la elección del material.
Todos estos antecedentes pueden ser demostrados y han sido hechos públicos, el mismo Ministerio del Ambiente en 2016 -a través de su Ministro de la época- admitió el problema.
“Como administradores cumplimos en informar a la ciudadanía que la obra no fue ejecutada de manera apropiada por no cumplir con las especificaciones técnicas que incluía instalar transversalmente los tablones plásticos y no longitudinalmente como ha sido realizado” Ministro del Ambiente Daniel Ortega
Vale la pena anotar que ya entonces se dejaba ver que había un problema legal en cuanto a la entrega oficial al gobierno de obras entre ellas las ciclovías de parte de los constructores. Incluso dejó claro que había un problema en lo referente a la seguridad de la isla. Es decir que lo que esta pasando en Santay ahora tiene una larga cola.
En 2018 los problemas siguen y la prensa se hace eco de las denuncias de los visitantes.
A QUIEN LE CORRESPONDE LA SEGURIDAD DE LA ISLA SANTAY?
Inicialmente debería ser uno de los objetivos del Ministerio del Ambiente al tratarse de una Area Protegida, independiente de su categoría.
Si bien es cierto los guardaparques no tienen el derecho de portar armas, deben existir otras maneras de enfrentar situaciones de riesgo o de peligro. Los guardaparques de Santay no tienen un equipo de comunicación vía radio. La señal internet que llega a la isla es muy baja.
Lo paradógico es que siendo una isla no exista una embarcación propia del Area Protegida para patrullarla por el río. Tampoco uno o varios guardaparques marinos que tomen esa responsabilidad.
Por el lado administrativo es el Cantón Duran el encargado de oficio de brindar seguridad a esta parte de su territorio. De ninguna manera el hecho de que sea una Area Protegida exonera a la población de Santay del derecho a estar protegidos por su administración política territorial.
Hace pocos días reflexionaba sobre la necesidad de establecer una norma "Galápagos" a todas las Areas Protegidas del Ecuador indiferentemente de su categoría. Concretamente a esa necesidad de darles la atención necesaria, de establecer en todas ellas lo que permite la ley, es decir Comités de Gestión que permitan un trabajo mancomunado entre sus administradores y los actores sociales que habitan e intervienen en dicha zona. Que sus guardaparques estén debidamente capacitados y tengan el equipo necesario para afrontar las permanentes necesidades que esa función exige. Que sus Administradores hagan prueba de responsabilidad técnica y pro-acción permanente pero también un poco de pasión por lo que hacen.
La Norma Galápagos es una necesidad. Un sello de calidad y garantía de buena gestión para el Sistema Nacional de Areas Protegidas.
NECESIDAD DE INVERTIR PARA MEJORAR EL TURISMO EN SANTAY
Uno de los problemas actuales de los gobiernos locales, provinciales y nacional es la falta de presupuesto. Eso se traduce rápidamente en la desatención de la obra pública. Siempre he dicho que nuestra sociedad so pretexto de pagar impuestos olvida sus responsabilidades cívicas y ciudadanas. Lo vemos cotidianamente: Porqué limpiar la vereda si el personal del municipio lo puede hacer,? es un simple ejemplo pero representativo de lo que sucede.
Eso no pasa en Santay, las ciclovías son uno de los atractivos principales y en lo que respecta al trayecto Guayaquil - Comunidad de Santay, es una responsabilidad del Ministerio del Ambiente su mantenimiento, pero quienes la remiendan son los pobladores, obligados por la necesidad. 3 metros de madera plástica cuestan un promedio de 27 dólares. Son ellos quienes se meten la mano al bolsillo. Al fin de cuentas como me lo han indicado permanentemente los dirigentes de la Asociación de Servicios Turisticos de Santay ese rubro de remendar se lleva las pocas ganancias que generan restaurante y alquiler de bicicletas. Ellos tienen todas las ganas de ayudar y lo hacen, pero la carga es fuerte
Muchos dirán, pero bueno si alquilan bicicletas deben de alguna manera mantener la infraestructura para que circulen. Sin embargo, en el caso de los visitantes cuya mayoría entran con sus bicicletas propias, ellos no pagan por ese mantenimiento.
El problema está en que si bien en 2012 se estableció la gratuidad de ingreso a las áreas del Patrimonio de Áreas Naturales del Estado (PANE), excepto Galápagos. En Santay no solo que el turista no paga sino que sus bicicletas particulares que contribuyen a deteriorar las ciclovías no pagan tampoco.
Como Asociación Amigos de Santay, pensamos que el cobro de 1 dólar por bicicleta particular que ingresa puede ya al menos remendar un hueco de 10 centímetros.
Pero debemos ser conscientes que esa no es la solución, ese material esta colapsado completamente. No solamente que resultó malísimo, sino que es caro en su mantenimiento. Solución: Cambiarlo completamente por madera plástica sólida y la actual puede darse como parte de pago ya que al parecer, dado el robo en la ciclovía a Duran, el reciclaje de ese material resulta comercialmente rentable.
RESPONSABILIDAD SOCIAL EMPRESARIAL
Hace pocos meses un accidente fluvial ocasionó que el puente Guayaquil Santay se deteriore. Sin posibilidad de accionar el seguro de accidente por razones que hasta ahora desconocemos. Mientras Ministerios se tiraban la pelotita sobre quien debería asumir e incluso de quién era la competencia de dicho puente y la espera de una mesa técnica de notables que debía reunirse y que no lo hacía, pasaron meses hasta lograr una simple solución y sucedió sin ningún problema.
Escribimos al Gerente de la Empresa Pública Astinave, le explicamos el problema que significaba para la población de Santay el no tener acceso de visitantes por el puente y con eso en menos de 24 horas el máximo de esa institución nos otorgó una cita, al no poder estar presentes, pedímos a los dirigentes de los pobladores asistir, resultado:Al día siguiente un contingente de soldadores, mecánicos y enderezadores ya estaban en el puente sacando piezas y trasladándolas a sus talleres para arreglarlas. En una semana el puente estuvo listo. A esto se le llama responsabilidad social de una empresa. Gracias Astinave EP
COLOR AL PUENTE
Para beneplácito de la población y turistas el 2 de enero el puente ya fue abierto.
Exactamente un mes después y para celebrar el Día Mundial de los Humedales Amigos de Santay realizó una intervención artística al mobiliario público del puente a fin de arreglarlos y pintarlos con motivos ambientales. Lo destacable de eso fue la presencia de pobladores de Santay, guardaparques y ciudadanos que se dieron cuenta de que dar una "mano de gato" a la obra pública no es un motivo de vergüenza sino lo contrario, de orgullo, pues ayudan a incentivar el turismo local.
QUE HACER?
Amigos de Santay recomienda que es necesario hacer un diagnostico completo de la situación de la obra publica en Santay, dejar de cubrir errores que se arrastran desde la inauguración de esas obras, pues el tema no es solamente las ciclovías, hay un problema enorme con el agua potable cuya planta en 10 años no ha servido sino pocas semanas por otro problema de diseño. Igual los sistemas de energía solar de las 56 viviendas y las luminarias exteriores. En fin. Un diagnostico que permita establecer una linea base para su recuperación.
El tema de la seguridad en Santay es caso aparte. Hay que tratarlo con mucha responsabilidad y tomar en cuenta todas las aristas, desde las responsabilidades del cantón Duran hasta la necesidad de patrullaje fluvial, pasando por un Comité de Gestión del Area Protegida que incorpore población, academia y ONGs.
Ahora que ya es de conocimiento público este tema, vayamos a fondo con todo lo que haya que solucionar. Tenemos que ser EMPATICOS con la población.