
Para diciembre próximo se prevé entregar parte de los proyectos  ecológicos y turísticos que ofreció el Gobierno en las islas Santay y  Puná.
En la primera isla, el informe de la consultoría de cómo  quedará programado de acuerdo al terreno avanza en un 80%; se espera que  los resultados estén a fin de mes para subir el contrato al portal de  compras públicas. Mañana, en Santay incluso se develizará el hito de  señalización de la ecoaldea que allí se construirá.
En Puná, en  cambio, algunas de las promesas ya están en ejecución, como los puentes  peatonales de las comunas Zapote, Bellavista y Cauchiche. Faltan todavía  las casas comunales, los parques, la plaza central y las canchas  múltiples, además de la dotación de agua potable.
El proyecto  para Santay, que cuesta en promedio 1’516.000 dólares, comprende la  creación de tres ecoaldeas (grupos de viviendas turísticas y ecológicas)  con 56 casas de maderas tratadas en total.
También abarca la  construcción de un muelle, de pasarelas de madera, de un centro comunal,  de un parque infantil y del servicio de energía eléctrica y de agua  potable.
Este plan con proyección turística fue la oferta que  hizo el Gobierno cuando mediante decreto traspasó la administración de  la Santay, de la Fundación Malecón 2000 (creada por el Municipio de  Guayaquil) al Ministerio de Ambiente, en febrero pasado.
Hace  tres semanas la comunidad de Santay aprobó los diseños iniciales,  afirman representantes del Gobierno, que viajan cada 10 o 15 días para  comentar a los nativos el avance del programa. En la cristalización de  la obra trabajan los ministerios de Ambiente y de Desarrollo Urbano y  Vivienda; y en el área social, también interviene el de Inclusión  (Mies).
En el programa ecológico se utilizará la luz natural como  energía con la ayuda de paneles solares. Las tres ecoaldeas están  divididas por su ubicación en norte, centro y sur.
La grande  será la del centro, que tendrá 50 casas de madera tratadas, con  estructura de hormigón, mientras que las dos restantes estarán dotadas  de tres viviendas cada una, explicó Raúl Sánchez, coordinador regional  del Miduvi, quien aclara que solo se le entregará las viviendas a las 56  familias que habitan allí y que fueron censadas con antelación. “No hay  ninguna más”, acotó.
Para tratar las aguas servidas utilizarán  un proceso anaeróbico (proceso bacteriano que se realiza sin oxígeno),  que limpia los residuos. Esta podría ser reutilizada para las baterías  sanitarias y para el riego con jardineras aéreas, detalló Cristóbal  Cruz, asesor del Miduvi en el plan Sociocomunitario.
“Para el  agua potable estamos analizando dos opciones. La primera por intermedio  de gabarras, como se hace actualmente. O la segunda, por la construcción  de un ducto que lleve el agua a la isla desde la ciudad”, contó Cruz,  al precisar que estudian también el costo de cada alternativa.
Como  el concepto es turístico y ecológico las autoridades aspiran a que un  70% de los habitantes de Santay trabaje en la construcción de las  viviendas, una vez que se los capacite.
En la isla Puná el  concepto ecológico es similar. Se habla de una inversión de $ 1’400.000  en lo que va de este año, incluyendo los $ 622.288,44 destinados a la  edificación de los pasos peatonales de las tres comunas mencionadas al  inicio.
Para el 2011, Sánchez estima que el presupuesto para Puná  será de unos $ 2’400.000, donde se contará la construcción de 540  viviendas ecológicas. En este año se entregaron 110 casas y están por  terminarse otras 90, según cifras del Miduvi.
Las obras que  priman en esta población, para ambos funcionarios, son las vías de  acceso a Puná como son los puentes y muelles. “El principal problema es  el ingreso y la salida. Se depende de la marea. Por la playa es difícil  por eso se buscan los esteros, una vez que la marea esté alta. Optamos  por hacer un muelle en Cauchiche y otro en Posorja”, acotó Cruz.
DetallesMuelles de ingreso a PunáEn  esta semana se elevará al portal de compras públicas los contratos para  edificar los muelles de Cauchiche (que llevarán a la comunidad del sur  de la isla) y en la parroquia Posorja, la más próxima a la isla Puná,  desde donde salen actualmente las embarcaciones.
Obras por ejecutarseSe  dará a Cauchiche y Bellavista $ 339.711,36 para cada una por la  construcción de la casa comunal, del parque, la plaza y una cancha. Y  para la casa comunal de Zapote se invertirán 55.515 dólares.
Agua potable en PunáLos  pozos que hizo la empresa Petróleos de Venezuela (Pdvsa), producen poca  agua, según funcionarios del Gobierno. Por eso buscan otras fuentes  naturales.
Fuente 
El Universo